CANTO III
[La puerta del Infierno]
Por mí se va a la ciudad doliente,
por mí se va al dolor eterno,
por mí se va entre la gente desesperada.
Dejad toda esperanza, vosotros que entráis.
[El guardián del Infierno]
Nada se creó antes de mí,
si no es eterno, y yo soy eterno.
Dejad toda esperanza, vosotros que entráis.
[La multitud de condenados]
Estos no son hombres, estos son sombras,
despojados de toda semejanza humana.
[El poeta y Virgilio]
Yo soy aquel que, cuando
el Amor me inspira, noto, y de esa manera
expreso lo que se dice dentro de mí.
Y Virgilio me dijo: «No te afligas,
porque en tu bien, yo te recojo
y te guío por el mejor camino».
[La entrada al Infierno]
Y después de que entramos,
cerré los ojos y me volví hacia atrás,
y regresé para volver a ver el sol.
Pero no allí donde se asciende.
Dante Alligeri
Divina Comedia.
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