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Mostrando las entradas de noviembre, 2010

EL HOMBRE ESTA VIVO CUANDO ESPERA

¡Queridos hermanos y hermanas! En el Adviento, la Iglesia inicia un nuevo Año Litúrgico, un nuevo camino de fe que, por una parte, hace memoria del acontecimiento de Jesucristo, y por otra, se abre a su cumplimiento final. Es precisamente desde esta doble perspectiva de donde vive el Tiempo de Adviento, mirando tanto a la primera venida del Hijo de Dios, cuando nació de la Virgen María, como a su vuelta gloriosa, cuando vendrá a “juzgar a vivos y muertos”, como decimos en el Credo. Sobre este sugestivo tema de la “espera” quisiera ahora detenerme brevemente, porque se trata de un aspecto profundamente humano, en el que la fe se convierte, por así decirlo, en un todo con nuestra carne y nuestro corazón. La espera, el esperar es una dimensión que atraviesa toda nuestra existencia personal, familiar y social. La espera está presente en mil situaciones, desde las más pequeñas y banales hasta las más importantes, que nos implican totalmente y en lo profundo. Pensemos, entre estas, en la esp

PRACTICAR LA FE

Y es que "practicar" la fe cristiana supone ciertamente la oración y los sacramentos, pero no sólo eso. Practicar la fe abarca el amor a Dios y el amor al prójimo, dar culto a Dios y servir a los demás con la caridad y la justicia Con frecuencia se oye decir: «Creo pero no practico». Si se pregunta por el significado concreto de estas palabras, el encuestado responderá que acepta la existencia de un ser trascendente, incluso de un Dios personal; pero que no reza —al menos como entiende que la Iglesia prescribe—, no va a Misa, no se confiesa, etc. Y así se ha extendido esa expresión, que tiene su sentido a la vez que encierra una contradicción, no percibida por el que la sostiene. Y es que "practicar" la fe cristiana supone ciertamente la oración y los sacramentos, pero no sólo eso. Practicar la fe abarca el amor a Dios y el amor al prójimo, dar culto a Dios y servir a los demás con la caridad y la justicia. En uno de sus sermones exhorta San Agustín: «Dichosos nosot

FORMAS ETÉREAS IV

Nunca he querido escribir este poema nunca desee que existiera... AUSENCIA I Estaré esperando el cometa caído estaré esperando el orgullo caer esperare la angustia llegar y es sonido del mar... Seguiré cazando con mi lanza vida de cambios y condenas pescando peces en el rió, juramentos toscos y olvidados... Perdones exclamare en la montaña suplicio de clavos que carne desgarran regalos sin noche, sin ternura, sin sol... como el niño en la oscuridad. II aguardiente, aguamiel, fermento del hombre vinculo que desahoga vinculo que separa vinculo que cambia, destierra olvida... bebamos... III El buscador busca pero a veces no encuentra encuentra las botas olvidadas los sacos rotos y camisas dejadas por los demas suciedad en los zapatos de camino suciedad en la piel del tiempo... los buscadores buscan sin saber que buscan pero encuentran, las manos, los labios los besos, los amantes, las joyas... Los buscadores buscan aunque no saben que buscar los clavos, las espadas, las flores... los oj

FORMAS ETÉREAS III

CONTACTO Quisiera contarte una historia de amor que con estas palabras puedas volar que desde allí vieras mi mundo... y entendieras mi mirada... mi sonrisa... mis caricias... mis abrazos... Entenderás mis juramentos mis actos cerrados y la acción detrás del telón... Entenderás mis tumbas mis ataúdes, mis sombras y mis lunas... mis soles y mis llamas... Quisiera contarte una historia de amor... sin miedo... sin rencor... quisiera contarte una historia de amor sin llanto... sin silencios... Sin abandonos, ni cicatrices, sin obsesiones, ni delirios, sin soledades, ni olvidos... Quisiera...quisiera... RAÍCES He fallado, me he equivocado he dejado morir la rosa de jardín he fallado, me he equivocado... Removí la tierra la tierra que pensé muerta deje que sembraras tu semilla deje que germinara, deje que creciera lentamente... hermosa rosa de castilla hermosa rosa en mi jardín sin raíces, sin raíces en mi la deje crecer... EN EL FONDO Hoy hay desvarió golpeo las paredes me muero lentamente..

ACERCA DEL CENTENARIO

"Que lejos y que tan cerca se ve la revolucion mexicana", que tan lejana se ve la revolucion, lejos por el tiempo, lejos por los recuerdos, lejos por la historia, y a la vez que cerca se siente, cerca como hoy, como las injusticias, los campecinos y los trabajadores, que tan lejos en los ideales que tan cerca en las costumbres. Cuando apenas comenzaba el siglo XX Mexico padecia la dictadura de un militar Oaxaqueño, buena o mala persona su gobierno nos coloco por años a la cabeza de los paises latinoamericanos, a la vanguardia del pensamiento, las ciencias y las artes, pero la sociedad debilitada por un feudalismo disfrazado en los albores de este nuevo siglo. Nunca las guerras han solucionado las cosas, pero una sociedad harta y cansada de la opresion, de la pobreza, de la marginacion, viendo como la riqueza se junta en unos pocos, se amaza en unos cuantos, se disfruta en señores, cacique como los de antes, esto es un foco de ansiedad, un polvorin a un levantamiento, un mexic

ACERCA DEL CENTENARIO

L a Revolución Mexicana fue un conflicto armado, dando inicio el 20 de noviembre de 1910 . Históricamente, suele ser referido como el acontecimiento político y social más importante del siglo XX en México. Los antecedentes del conflicto se remontan a la situación de México bajo el Porfiriato . Desde 1876 el general oaxaqueño Porfirio Díaz encabezó el ejercicio del poder en el país de manera dictatorial . La situación se prolongó por 34 años, durante los cuales México experimentó un notable crecimiento económico y estabilidad política. Estos logros se realizaron con altos costos económicos y sociales, que pagaron los estratos menos favorecidos de la sociedad y la oposición política al régimen de Díaz. Durante la primera década del siglo XX estallaron varias crisis en diversas esferas de la vida nacional, que reflejaban el creciente descontento de algunos sectores con el Porfiriato. Cuando Díaz aseguró en una entrevista que se retiraría al finalizar su mandato sin buscar la r

SAN DIEGO DE ALCALA

Empezamos esta breve silueta hagiográfica reparando una, no por lo generalizada menos digna de ser reparada, injusticia en la denominación del santoral español al designar a San Diego con el toponímico de Alcalá de Henares, en lugar del nombre de la villa de San Nicolás del Puerto, en la provincia de Sevilla. Insignificante por su demografía, es la villa de San Nicolás del Puerto uno de los lugares más típicos y pintorescos de la provincia andaluza. Se halla situado al norte de la misma, en pleno complejo montañoso, con gran riqueza hidráulica, que dan a sus alrededores extensas zonas cultivadas y amplias alamedas. Su altitud y arboledas hacen del lugar un oasis en la canícula sevillana. San Nicolás, en su insignificancia demográfica y urbanística, tiene un lugar en la historia por el mejor de los títulos que dan entrada en ella, por haber sido cuna de uno de los hombres que figuran en el santoral de la Iglesia católica. Hacia fines del siglo XIV, sin que sea posible concretar más la f

ACERCA DEL CENTENARIO

Doroteo Arango Arámbula) Revolucionario mexicano (San Juan del Río, Durango, 1876 - Parral, Chihuahua, 1923). Campesino pobre, huérfano y con escasa formación, cuando estalló la Revolución de 1910 llevaba varios años fugitivo en las montañas por haber asesinado a uno de los propietarios de la hacienda donde trabajaba. Enseguida Pancho Villa se unió a Madero en su lucha contra la dictadura de Porfirio Díaz, y demostró una habilidad innata para la guerra. Aprovechando su conocimiento del terreno y de los campesinos, formó su propio ejército en el norte de México, con el cual contribuyó al triunfo del movimiento revolucionario. Pancho Villa En 1912 fue encarcelado, al sospechar el general Victoriano Huerta que estaba implicado en la rebelión de Orozco en defensa de las aspiraciones sociales del campesinado, que Madero había postergado. Consiguió escapar a los Estados Unidos y, tras el asesinato de Madero, regresó a México y formó un nuevo ejército revolucionario, la División del Norte (19

ACERCA DEL CENTENARIO

EMILIANO ZAPATA (San Miguel Anenecuilco, México, 1879 - Morelos, 1919) Revolucionario agrarista mexicano. Símbolo del agrarismo, T enía veintitrés años cuando apoyó a la Junta de Cuautla en sus reivindicaciones por los ejidos de Morelos, su estado natal. La persecución desatada contra la Junta por el régimen porfirista lo llevó a Cuernavaca y luego a México como caballerizo del ejército. De regreso en Morelos, Emiliano Zapata retomó la defensa de las tierras comunales y, en 1909, fue designado jefe de la Junta de Ayala. Al frente de un pequeño grupo armado, ocupó las tierras del Hospital y las distribuyó entre los campesinos. Tras la caída de la dictadura de Porfirio Díaz, pronto aparecieron las discrepancias entre Zapata, quien reclamaba el inmediato reparto de las tierras de las haciendas entre los campesinos, y Madero, que por su parte exigía el desarme de las guerrillas. Por fin, Zapata aceptó el licenciamiento y desarme de sus tropas, con la esperanza de que la elección de Madero

LA MUERTE

El cristiano sabe que la muerte no solamente no es el fin, sino que por el contrario es el principio de la verdadera vida, la vida eterna. En cierta manera, desde que por los Sacramentos gozamos de la Vida Divina en esta tierra, estamos viviendo ya la vida eterna. Nuestro cuerpo tendrá que rendir su tributo a la madre tierra, de la cual salimos, por causa del pecado, pero la Vida Divina de la que ya gozamos, es por definición eterna como eterno es Dios. Llevamos en nuestro cuerpo la sentencia de muerte debida al pecado, pero nuestra alma ya está en la eternidad y al final, hasta este cuerpo de pecado resucitará para la eternidad. San Pablo (Rom.8:11) lo expresa magníficamente: "Mas ustedes no son de la carne, sino del Espíritu, pues el Espíritu de Dios habita en ustedes. El que no tuviera el Espíritu de Cristo, no sería de Cristo. En cambio, si Cristo está en ustedes, aunque el cuerpo vaya a la muerte a consecuencia del pecado, el espíritu vive por estar en Gracia de Dios. Y si e